
Básicamente, de lo que se trata es de un diseño que imita o copia las funciones del cerebro, en su forma de razonar o deducir situaciones complejas, en las que se maneja cierta cantidad de información, llegando a conclusiones lógicas y coherentes.
Así como un ordenador tiene Hardware y Software, el ser humano posee un cerebro(hardware) y un Software(sistema operativo).
En la Biblia surge una historia, que cuando se analiza en profundidad, resulta ser el esquema o mapa de ese sistema operativo.
El diseñador o Creador del sistema decide probarlo, para comprobar si se desarrolla correctamente o si requiere algún tipo de aprendizaje, es por ello que lo coloca ante una situación imposible, y paradójica para observar su reacción.

En lugar de eso, el sistema operativo demuestra lo poco avanzado que esta, diseñando una solución alternativa, que difiere de la respuesta esperada por el Creador, la cual le permite quedar en dilación, mientras consigue alcanzar la respuesta, experimentando de forma temporal con su propia indecisión.
Para ello diseña varios mecanismos o subsistemas, que le permitirán experimentar la situación hasta llegar a la conclusión definitiva.
Primero se disocia del problema colocándolo en un árbol manteniéndolo a la espera, después se disocia de si mismo, dividiéndose en dos fragmentos opuestos, pero complementarios, creyendo que así puede librarse de cometer un error, atribuyéndoselo a algo que no sea el mismo, haciendo que la parte de si mismo, que ya no reconoce como perteneciente al propio sistema, realice lo prohibido y así, tras la disociación, eludir el error, o culpa, que de ser su decisión, le originaría.
La parte del sistema disociada, que sigue operando como el original, rediseña a su vez la situación, tal como hace su predecesor, otorgándole la comisión del error o falla a un elemento neutro, el cual al no poder asumir ninguno de los conceptos, anteriores sigue ignorante de lo sucedido.
Eso permitió al sistema operativo, realizar una decisión transitoria, sin tomar ninguna decisión, osea jamás asume responsabilidad por su propios actos, hasta experimentar y obtener el resultado correcto.
Eso desarrolló un sistema circular y absurdo del que no hay respuesta, ni salida, ya que la respuesta correcta, seria la comprensión de que tal situacion no puede darse.
Para ello solo tendría que reírse de su propia estupidez y asumir la responsabilidad de su error, que solo consistió en creer que podría cometer un error.
